Spencer Tunick es un ejemplo de superación de prejuicios porque consigue que un concepto tradicionalmente considerado como un tabú (la desnudez) pueda expresarse con su significado preciso
Hoy en día seguimos teniendo una serie de prejuicios que nos limitan a la hora de ser creativos. Algunos ya han comenzado a superarlos y, en esta línea, me parece fascinante el trabajo del fotógrafo Spencer Tunick quien, en su proyecto denominado Naked States (Estados desnudos), realiza fotografías de grandes masas de personas desnudas dispuestas en artísticas formaciones, a menudo situadas en localizaciones urbanas.
Es fascinante conseguir que conceptos tradicionales considerados como un tabú puedan expresarse con su significado preciso y combinando entre sí lo público y lo privado, lo tolerado y lo prohibido, lo individual y lo colectivo, conceptos que, posiblemente para muchos, generan cierta tensión.
En mi opinión, esta provocación es un paso hacia delante en el mundo de la creatividad, independientemente del aspecto artístico que se puede observar en sus composiciones fotográficas. Lo que le hace creativo es conseguir que grandes masas de personas, sin importar el color, el sexo, la posición social, etc, participen en la instalación poniéndose desnudas ante el objetivo. Lo fascinante, en mi opinión, es la forma en que el artista los trata: la masa es protagonista de una situación, consiguiendo una obra bella, armónica, y de una gran sensibilidad. La genialidad es romper de forma insólita con lo establecido y conseguir una aceptación masiva.
Este fotógrafo no se puede denominar como «extravagante, estúpido o loco» porque en este siglo la provocación es un recurso necesario en el creador.
Web del fotógrafo
Repercusión de su obra en nuestro país.
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